Hoy quiero dar una nota de esperanza, puede que parezca que se pierde en la noche, pero será una nota musical que una vez lanzada al viento puede recorrer el universo, con lo cual, siempre estará esa esperanza.
Cuando diagnostican a un familiar de TOC puede ser un gran descanso poner nombre, puede que nos cueste asimilarlo o puede que nos llene de ansiedad. Incluso puede que nos sintamos culpables por no haber sabido identificar al monstruo antes, pero es que el TOC es escurridizo y traicionero. Así que fuera culpas, lo hemos hecho de la mejor manera que sabíamos. Respiremos hondo, y lo mejor para poder luchar contra el trastorno es conocerlo a fondo. No sé si llamarlos consejos, cada uno lucha con sus armas y estas son las que a mí me han funcionado, espero que os ayuden.
1) No luches contra el TOC, no razones, no lo alimentes. Más bien aprende a manejarlo, lee mucho, infórmate, conocelo a fondo. No actúes por intuición, a veces en un intento de aliviar a nuestro familiar alimentamos su TOC.
2) Conoce a fondo el TOC, de esa manera podrás entender más a tu familiar. Sólo conociendo al enemigo podrás vencerlo, podrás entender las actitudes y respuestas de nuestros familiares ante esas situaciones que no nos parecen normales.
3) "Emociones expresadas, emociones liberadas". Ante ciertas situaciones las emociones se liberan, la frustración se desencadena. Recuerda que en este trastorno la lógica no tiene sentido, el TOC se basa en la duda y el miedo así que intenta expresar como te sientes con empatía, sin culpabilidad. Entiende que ellos lo intentan de la mejor manera que saben o pueden en ese momento. Aleja el drama de vuestra vida e intenta hacerle un hueco a la risa. Enfrenta el TOC desde otra perspectiva, " pa chulo chulo, mi pirulo. Vamos abrir esa puerta con el pomo lleno de gérmenes, voy a salir a comerme el mundo con la misma ropa de ayer. Porque yo lo valgo".
4) No participes en los rituales. Parece imposible, sobre todo cuando ya se ha entrado en esa dinámica. Si ya has empezado terapia será más fácil ponerte a un lado y decirle, "no quiero hacer más fuerte al señor TOC" . Ten paciencia, puede que a veces se agote y explotemos, está bien, somos humanos, no somos perfectos. Explícaselo así, no estás luchando contra tu hijo, dale calma, seguridad, no le juzgues. Cada uno tiene su ritmo, lo importante es llegar al final del camino con todas las herramientas dispuestas.
No sé si esta serie de consejos os servirán de ayuda, a mí me sirvieron y espero que a vosotros también. Ánimo, se puede.
Pd: Esta publicación ha sido escrita por una madre (golondrina resiliente) con una hija con TOC, si vosotros también queréis participar en el blog sólo tenéis que contactar con nosotros por facebook o mediante el correo electrónico: kakuyumenewleaf@gmail.com
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