¿Una sociedad con TOC?

Sentía la necesidad de escribir esto. Porque hoy ha sido un cúmulo de sentimientos y emociones. Miedo, preocupación, pero también algo de liberación. Hasta incluso gracia. 

Llevo desde los 16 años lidiando con una guerra constante en mi cabeza. Y que convirtió mi vida en un auténtico infierno. Como la de todas las personas que padecemos trastorno obsesivo compulsivo. Hizo que abandonara TODOS mis sueños. Todas mis metas. Que abandonara a mi familia. A amigos. Y sobre todo a mí. 

Hay tantos, tantos tipos de TOC, que sería imposible decirlos todos. Porque cada TOC es un mundo. Pero resumiendo, mi TOC se basa en contaminación mágica. Tengo pensamientos  y obsesiones que me hacen sentir sucio, mala persona, y por ese mismo motivo, me lavo o me lavaba las manos de forma incesante para aliviar ese malestar, culpa, asco y ansiedad que me provocaban. Porque esa suciedad mental pasaba a mis manos, y de mis manos, a lo que tocaba. Y me llevaba a  realizar ciertas acciones.

Si pensaba algo de esto, tenia que volver a repetir dicha acción. Lavado de manos que me han dejado las manos destrozadas, con quemaduras por lejía. Me he duchado en lejía y amoniaco. Y gastado gel y jabón como si no hubiera un mañana. He lavado objetos de forma incansable con alcohol y jabón hasta incluso llegar a romperlos. He echado ropa a lavar sólo por tocarla y pensar algo que yo consideraba "sucio". He tirado compras enteras después de salir del súper, por pensar algo que me ha hecho sentir sucio y mala persona. Y como todo esto un largo etcétera.

Entre los que se encuentran capítulos muy oscuros que quiero que formen parte del pasado. Tuve que dejar mi carrera, no he podido sacarme el carné de coche, me han echado de trabajos, se han reído de mí, se han burlado, he estado completamente solo, y he sido un incomprendido durante tanto, tanto tiempo...

Pero por suerte, vi luz al final del túnel. Y en 2016 me mudé a Granada. Porque encontré una salida. La Asociación TOC GRANADA, fundada por Aurelio. Jamás jamás me cansaré de agradecer todo lo que este hombre ha hecho por mi. Él, y por supuesto mi psicóloga Encarni, mi hada madrina. Me faltará vida para agradecer a ambos todo lo que han hecho para sacarme de ese infierno. Y digo sacarme porque a día de hoy no estoy completamente curado. Pero tengo una calidad de vida. He hecho una vida. Y cada vez hago más cosas que Jesús quería hacer y no el TOC de Jesús. Y así voy, poco a poco. Superándome día a día. Volviendo a dibujar, con sueños e inquietudes. Y toda una vida por realizar.

Tras una "breve" introducción, la cuestión no es esta. La cuestión es que paradójicamente, veo cómo está la situación en nuestra sociedad hoy día, por el tema del coronavirus. Y, obviamente, por el bien de todos, toca hacer la cuarentena, no salir a la calle, y realizar ciertas conductas de higiene para que esta pandemia acabe lo antes posible.

Hoy he ido al supermercado tras varios días sin salir para comprar y subsistir. Había una cola enorme para entrar al supermercado. Y guardar al menos un metro de distancia entre persona y persona. Al entrar cuando el vigilante te dejaba, lo primero que había que hacer era lavarse las manos con desinfectante, secártelas, y ponerte guantes, para, seguidamente coger el carro. 

No se puede tocar a nadie. Todo el mundo con mascarillas, con guantes, evitando pararse con nadie. Otros días, ni un bote de gel. Ni servilletas. Ni el famoso papel higiénico. Y mucho menos alcohol. Nadie quiere contaminarse. Todo el mundo tiene miedo.

Pero antes de todo esto, desde los 16 años, yo ya he vivido en confinamiento. Ya me he lavado las manos por tres o cuatro días en uno. Ya he gastado todo el papel higiénico posible, todas las servilletas que he podido o he limpiado todos, todos los objetos que he podido con alcohol. Por una suciedad inexistente que sólo vive en mi cabeza. Ya he vivido ese miedo, esa desesperación a la incertidumbre. Al "y si". Evitando tocar gente. Tocando las cosas con guantes o lavándome 300 veces las manos al día. 

Yo ya he sentido lo que ahora la sociedad está sintiendo. Porque, aunque este virus SÍ es real, no se ve. Como mis pensamientos los cuales me contaminan. Los cuales han hecho que me limpie hasta el cansancio. No sé cuánto durará esto. Pero cuando pase, la mayoría de la gente intentará olvidar este infierno de meses. Y seguirá su vida normal. Aprovechando todo lo que el coronavirus les ha quitado. A mi no me lo ha quitado el coronavirus. Me lo ha quitado el TOC. Y todo lo que está pasando sólo son situaciones que yo ya he vivido. 

Pero habrá amigos y compañeros míos, que cuando todo esto pase, ellos seguirán reclutados en su casa. Asustados. Contaminados. Y realizando las mismas conductas que tú, que hoy lees esto y tienes la suerte de tener una salud mental "estable" realizabas cuando estaba la pandemia. Porque seguro que esto en unas semanas habrá pasado, siendo optimistas. Yo llevo 10 años. Otros amigos míos 20. Y otros toda toda su vida. 

Así que, como persona afectada de TOC, con mejores y peores momentos, pero altamente recuperado, te pido EMPATÍA. No juzgues. No critiques. No te rías de aquello que no entiendas. Ayuda en la medida de lo posible. Tiende tu mano. Porque creo hay alrededor de tres millones de personas afectadas de TOC en España. Quizás una sea tu pareja. Tu amig@. O esa persona que conoces de vista a la que ves con "sus manías y sus cosas". Hoy las estas haciendo tú también. Y tampoco ves aquello que te contamina. Sólo quiero que se haga examen de conciencia, y que antes de hacer cualquier comentario, te pongas en el lugar de esa persona.

Porque, sin quitar ni restar importancia al coronavirus, ni mucho menos, tengo amigos cuyas vidas han sido destruidas por este otro virus invisible que sólo ataca a la persona desde su cabeza. Sólo espero que ahora se nos pueda entender mejor, y esto se haga mucho más visible. Que se nos entienda mejor. Porque no estamos solos.

Amigo o amiga con Toc. Aquí tienes mi mano. Somos muchos y NO ESTAMOS SOLOS. NUNCA lo hemos estado y NUNCA lo estaremos.

Dedicado a todas y cada una de las personas con TOC que conozco, y también a las que no. Porque te conozca o no, tod@s estamos en el el mismo barco. Un abrazo enorme.

Pd: Esta publicación ha sido escrita por un afectado de TOC (Jesús García), si vosotros también queréis participar en el blog sólo tenéis que contactar con nosotros por facebook o mediante el correo electrónico: kakuyumenewleaf@gmail.com